Un grupo de lancheros de la cascada de Tamul, en el municipio de Aquismón, rompieron hace unos días algunos diques que utilizan cañeros de la región para hacer llegar agua a la cascada, pues los bajos niveles impiden que realicen trabajos turísticos.
Esto ha provocado una batalla entre lancheros y cañeros, afectados por la sequía que afecta a la Huasteca potosina. Los trabajadores de la cascada de Tamul aseguran que los ingenios azucareros utilizan presas clandestinas para captar agua que usan para su cultivo.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua), en un comunicado de prensa, explicó que la Zona Huasteca ha sido afectada por sequía extrema desde 2018. Como consecuencia, los niveles de los ríos Valles y Gallinas registran su nivel más bajo de los 62 años de los que se tiene registro.
“Los pronósticos de precipitaciones para los próximos dos meses indican que seguirán presentándose lluvias escasas, por lo que todos los usuarios deben administrar de mejor manera los escasos escurrimientos de los ríos”, apuntó la Conagua.
Según esa dependencia federal, el rompimiento de los diques puede provocar un descenso abrupto del nivel de los ríos: “esto puede hacer necesario que -como medida emergente- Conagua cancele el uso del agua para la agricultura o turismo, con la finalidad de asegurar su uso exclusivo para consumo humano”.
“Es importante destacar que el problema de fondo es la prolongada sequía, que afecta no sólo a la región de la Huasteca, sino a gran parte del país. Por ello, se exhorta a la población a hacer un uso racional y eficiente al agua, evitando el desperdicio del agua”, termina el comunicado de prensa de Conagua.
